Lista de páginas

Cerebro Digital Vs. Cerebro Analógico

La manera en que los pueblos se desarrollan y alcanzan su potencial es a través de la educación. En mi País tenemos una deuda con el tiempo. La era Industrial en la cual se formó el modelo educativo que todos conocemos ya desapareció. Nos encontramos en la era digital y la educación que nuestros hijos están recibiendo pertenece a la era industrial. Por muy duro que suene, la generación nacida a partir del año 2000 está siendo educada para una época que no existe ni existirá. Lo puedo expresar aún más directo: la educación que están recibiendo nuestros hijos en las escuelas no les servirá de nada en su vida adulta. 
     La generación Z (nacidos a partir del año 2000) es la generación de "Cerebros Digitales" cuyos padres (Nosotros, la generación X e incluso algunos Millenials) somos de "Cerebros Analógicos". En mi consulta muchos padres angustiados expresan que sus hijos se aburren en clases, no están motivados para estudiar o pierden demasiado tiempo en los video juegos, tabletas o internet. Es de esperar que un padre analógico le cueste procesar cómo se siente y se expresa un niño digital. La brecha en estas dos generaciones ha creado la paradoja que en algún momento Pilar Sordo (Psicólogo Chilena, autora de libros y muchas otras obras) ha mencionado como que existe una generación de hijos que le tuvo miedo a sus padres y éstos se convirtieron en una generación de padres que le tiene miedo a sus hijos. Es importante reconocer que esto es un tema fascinante que no debe generar temor en los adultos. Aún y cuando tengamos un procesador analógico podemos aprender a actualizar las Apps de nuestro cerebro y ponernos al día con estos chicos que piden a gritos la comprensión y acompañamiento de sus padres en su proceso de aprendizaje y desarrollo. 
     De una manera sencilla podemos diferenciar cómo funcionan conductualmente estos cerebros. Los analógicos, por ejemplo, son personas que retienen. Sí, se apegan, no sueltan. Tienen en sus celulares muchas aplicaciones que no usan (por si en algún momento son importantes) y colapsan la memoria de su móvil. Si se molestan les dura días y a veces hasta semanas el rencor o el grunch que tienen con otros. Les cuesta olvidar los malos ratos. Se apegan a relaciones tóxicas y así. Los cerebros digitales se caracterizan por tener la facilidad de soltar, de no ocupar espacio innecesario en la memoria. Si se pelean, a los minutos están contentos otra vez. Si requieren de un aplicación en el celular o tableta, la descargan, la usan y la borran. Saben que la pueden descargar si la necesitan de nuevo en el futuro. Olvidan rápido los momentos desagradables y dejan ir a las personas (amistades, parejas, familiares) sin tanto conflicto. Son menos dramáticos que los analógicos y entienden que el conocimiento se obtiene de forma lineal experimentándolo a través de sí mismos y no a través de otros facilitadores. Es imperativo, urgente, prioritario entender que la educación, desde la inicial, debe cambiar y evolucionar para ponernos al día con los tiempos correctos y darles a nuestros hijos la experiencia que merecen para estar preparados para el futuro que merecen. Me encuentro asesorando como consultor  en Educación Disruptiva a una Unidad Educativa que ha decidido dar el salto y aún y cuando los resultados no son inmediatos es gratificante saber que, en nuestro contexto actual (Venezuela), con las limitaciones de estructura legal, cultural y socioeconómica, podemos lograr grandes cosas y comenzar a cambiar la mentalidad (mindsetting) de los prestadores de servicios educativos observando un resultado inmediato en los usuarios: "mami hoy vimos clases súper diferente, estuvo buenísimo"; "Si mis clases fueran así siempre sí me provoca ir al colegio"; "es muy divertido divertirse en clases, creo que se aprende más así"... Falta mucho por hacer en materia educativa pero como dice un Proverbio Chino: "Un viaje de mil leguas comienza con el primer paso". (@jcbranger)